La glucosamina ayuda a mantener un sano funcionamiento de las rodillas
Un estudio publicado en el British Journal of Sports Medicine analizó los efectos de la suplementación con glucosamina en la capacidad funcional y en el dolor crónico de rodilla en individuos con daño al cartílago previo o con osteoartritis.
A los sujetos se les suplementó al azar glucosamina o un placebo durante 12 semanas a una dosis de 2,000 mg por día. A lo largo del estudio se llevaron a cabo cuatro sesiones de pruebas. Los cambios en el dolor de rodilla y en el funcionamiento de la rodilla estuvieron determinados por pruebas clínicas y funcionales (palpación en la línea de la articulación, una “caminata de pato” de tres metros y subir repetidas veces una escalera). Adicionalmente, se aplicaron dos diferentes cuestionarios para evaluar los cambios en el dolor.
Se determinó que el grupo que recibió glucosamina tenía calificaciones significativamente mejores en cuanto a calidad de vida en las semanas 8 y 12 que el grupo que recibió un placebo. Con base en autoevaluaciones de cambios durante el periodo de 12 semanas de suplementación, 88% del grupo que recibió glucosamina informó cierto grado de mejora en su dolor de rodilla versus sólo 17% en el grupo que recibió un placebo.
Estos resultados sugieren que la suplementación con glucosamina puede ofrecer cierto grado de alivio del dolor y una mejor función en individuos que padecen dolor crónico de rodilla debido a daño previo en el cartílago o a osteoartritis. Los resultados también sugieren que a una dosis de 2,000 mg por día, la mayoría de las mejoras se hacen aparentes después de ocho semanas.