Niveles suficientes de vitamina D están relacionados con la salud cardíaca
El interés sobre la vitamina D ha ido en aumento durante los últimos meses gracias al incremento del número de estudios que vinculan la vitamina D con la protección contra la osteoporosis y ciertos tipos de cáncer. Existe también la evidencia que demuestra que altos niveles de ingesta de vitamina D puede resultar beneficioso contra la presión arterial elevada, la fibromialgia, la diabetes mellitus, la esclerosis múltiple y la artritis reumatoide.
En un estudio, los investigadores examinaron los datos relativos a 1 739 participantes en el marco del estudio Framingham Offspring para estudiar la relación entre los niveles de vitamina D y el riesgo de enfermedades cardiovasculares. Aunque los niveles de vitamina D sobre los 30 ng/mL se consideran como óptimos para el metabolismo óseo, solamente el 10 % de los participantes mostraron niveles dentro de este rango. De hecho, el 28 % de ellos tenía concentraciones por debajo de 15 ng/mL. Los participantes con valores bajo los 15 ng/mL mostraban un 62% más de riesgo de desarrollar un problema cardiovascular en comparación con aquellos con niveles más elevados. Las personas con bajo nivel de vitamina D y presión arterial elevada (más de 140 / 90 mmHg) doblaron el riesgo de padecer problemas cardiovasculares en comparación con aquellas que tenían valores normales de presión arterial y vitamina D.
La vitamina D es producida por la piel ante la exposición de los rayos ultravioletas UVB (luz solar) y se obtiene además a través de la dieta, en alimentos tales como el pescado de piel grasa, la yema de huevo y el hígado. Estudios recientes han demostrado, sin embargo, que los niveles de luz solar en países nórdicos son tan débiles durante los meses de invierno que el cuerpo apenas sintetiza vitamina D, o no lo hace, lo que conduce a una deficiencia sistémica de vitaminas. Además, el aumento de la pigmentación de la piel también reduce el efecto de la radiación UVB, lo que significa que las personas con tez más oscura están más a riesgo.
Los resultados de este estudio sugieren la posibilidad que el tratamiento de la deficiencia de vitamina D mediante la ingesta de suplementos y/o cambios del estilo de vida podrían reducir el riesgo de sufrir un evento cardiovascular.